Palestina de los Altos, en crisis
Rotas la paz y armonía históricas
Foto tomada de Canal 3
De sorpresa en sorpresa; primero, porque en muchos años de paz y armonía, de pronto la paz se rompe por razones poco claras aunque entendibles desde el punto de vista de los intereses políticos… A juzgar por las primeras reacciones de los protagonistas que a distancia observamos, la continuidad y el deseo de un cambio, se contrapusieron hasta que reventaron el hilo por lo más delgado.
Y la vieja tradición de respeto y entendimiento llevó a otro asunto: la larga permanencia de un hombre al frente del poder público. La televisión (Canal 3) y el principal periódico guatemalteco (Prensa Libre), destacaron los disturbios en una cabecera municipal, cuyos habitantes, dicen ambos medios, encolerizaron porque Werner Gudiel Morales Hernández, jefe edilicio, abandonó una reunión de trabajo en la que se analizaba el tema de la falta de agua potable. Craso error de un funcionario público obligado, por ley, a escuchar y atender las demandas de sus gobernados.
Según Canal 3, Morales Hernández lleva en el poder 18 años consecutivos, lapso que probablemente ningún otro edil haya logrado hasta hoy; eso explica en parte, las razones de los disturbios, pero de ninguna manera justifica los medios utilizados, puesto que con violencia lo único que se logra es el desprestigio y, desde luego, la repulsa de la mayoría de los ciudadanos que prefieren la paz a los actos fuera de la ley.
Sobre el tema del agua potable, debemos decir que es un asunto muy viejo. Hasta donde la memoria alcanza, desde la década de los 70’s, el vital líquido ha sido una de las principales carencias en todo el municipio. Por ejemplo, los habitantes de la cabecera municipal de la zona norte (atrás de la Escuela “Rafaél Landivar”, hasta parte del caserío “El Socorro”, tenían que acarrear el agua en un deficiente chorrito que instalaron donde se encontraba la Iglesia Vieja. De hecho, en “El Socorro no habpia agua potable, pese a estar a solo unos metros del casco urbano y sus habitantes se abastecían en pozos artesanales o en los ríos que rodean lo que hoy es el estadio de fútbol.
El agua que se consumía en el centro del poblado, lo traían mediante tubería desde un nacimiento de agua en la cima de un cerro colindante con San José Granados, municipio de San Antonio Zacatepéquez y se almacenaba en una presa ubicada en la parte alta de la cabecera de Palestina de los Altos. Hoy, lamentablemente, es tema de controversia y lo peor: motivo para una vergonzante revuelta. Y digo vergonzante, porque rompe, como hemos dicho líneas arriba, con una vieja tradición de respeto y armonía.
No hay pretexto para justificar un acto que lesiona la paz, aún cuando la autoridad haya perdido el respaldo ciudadano. En todo caso, que la permanencia o distanciamiento del alcalde en turno, se dirima en las urnas electorales y no mediante la violencia. En ese mismo tenor, sirva el triste episodio para que Werner Gudiel, haga un repaso de conciencia y atienda a tiempo el grito de una ciudadanía que posiblemente, ya no le quiera apoyar en sus aspiraciones de seguir gobernando a los palestinenses.
El buen político es aquel que sabe retirarse a tiempo; permanecer a fuerzas, es tanto como patear la buena suerte.
Por lo demás, deseamos sinceramente que las causas que motivaron la revuelta, se resuelvan conforme a derecho y apegada al sentimiento de paz y armonía de la mayoría de los ciudadanos de Palestina. Nos entristece que el municipio sea una mala noticia para el resto de los guatemaltecos; nos avergüenza y por lo tanto, convocamos a los protagonistas de tan lamentable desaguisado a una reconciliación inteligente, cuya única ganancia sea de beneficio para los buenos hombres y mujeres de ese pueblo.
A continuación, las notas periodísticas tomadas de los portales de Canal 3 y Prensa Libre; queden como un testimonio de lo que no podemos admitir de un pueblo con una historia de nobleza, trabajo, dedicación, respeto y armonía.
Disturbios en Palestina de los Altos (Canal 3)
Lo que todo parecía una mesa de diálogo en el municipio de Palestina de los Altos en Quetzaltenango, terminó con serios disturbios entre la población y el alcalde de aquella localidad Wagner Gabriel Morales. En plena reunión se caldearon los ánimos y tomaron el edificio municipal. El tema principal de la discusión sería la falta de agua, según la fuente de información de aquella localidad, sin embargo, los pobladores arremetieron contra el jefe edil por la escasez del vital líquido.
A él lo acusan de vender agua de esa jurisdicción a otros municipios vecinos, así como manipular este tema para sus intereses proselitistas con lo cual espera ganar un quinto períodos consecutivo ya que lleva 18 años en el poder.
Cuando todo parecía ser discusión sana, el alcalde abandonó la mesa lo cual el enojo de los participantes. Gabriel Morales, al notar que la gente había perdido el control, decidió refugiarse en la sede policíaca. Los pobladores también arremetieron contra loa PNC.
Se informó al cierre de esta nota informativa que los daños solamente habían sido materiales, pues los enardecidos vecinos, arremetieron hasta con las radiopatrullas.
Afortunadamente la intervención de las fuerzas especiales lograron el rescate del jefe edil y sus acompañantes.
Vecinos se rebelan en Palestina (Prensa Libre)
Una turba de unas 500 personas se rebeló ayer contra Werner Gadiel Morales Hernández, alcalde de Palestina de Los Altos, Quetzaltenango.
Los inconformes destruyeron la entrada de la subestación de la Policía y otros artículos usados por los agentes, y volcaron el autopatrulla 041-051.
La protesta comenzó alrededor de las 10 horas, y terminó dos horas después.
Los manifestantes intentaron agredir al alcalde. Incluso, amenazaban con lincharlo. Sin embargo, cuando Morales se vio intimidado, se refugió en la subestación de la Policía Nacional Civil (PNC), donde seis agentes estaban de turno.
Los vecinos lanzaron piedras y palos, volcaron un autopatrulla e irrumpieron en esa sede.
En medio del ataque apareció un grupo de policías de Quetzaltenango que logró rescatar al alcalde y a sus compañeros, y los trasladó a la cabecera departamental.
Los inconformes argumentaron que el alcalde vendió nacimientos de agua a municipios de San Marcos.
Morales tiene 18 años de ser alcalde de ese municipio; fue elegido por el Frente Republicano Guatemalteco y, para los próximos comicios, podría optar por la reelección, con la Gran Alianza Nacional.
“Este alcalde ha cometido actos de corrupción, pero la gota que derramó el vaso es que sin consultarnos vendió el agua, cuando está escasa”, explicó Pedro González Méndez, dirigente de los inconformes.
No obstante, los manifestantes no mostraron documentos que respaldaran las denuncias, ni una demanda en el Ministerio Público sobre los señalamientos.
Morales afirmó: “Es totalmente falso de lo que me están acusando; lo que hice fue ayudar a algunas familias que se encuentran en el límite del municipio, pero no he vendido nacimientos de agua a nadie. Si hay escasez de agua es porque estamos en verano”.
El alcalde presentó ayer denuncia, por lo sucedido, en contra de seis personas de un movimiento político.
Manuel Salguero, jefe de la Comisaría 41, informó: “Se le brindará protección al alcalde y esperaremos a que la situación se calme, para que pueda regresar”.
Foto tomada de Canal 3
De sorpresa en sorpresa; primero, porque en muchos años de paz y armonía, de pronto la paz se rompe por razones poco claras aunque entendibles desde el punto de vista de los intereses políticos… A juzgar por las primeras reacciones de los protagonistas que a distancia observamos, la continuidad y el deseo de un cambio, se contrapusieron hasta que reventaron el hilo por lo más delgado.Y la vieja tradición de respeto y entendimiento llevó a otro asunto: la larga permanencia de un hombre al frente del poder público. La televisión (Canal 3) y el principal periódico guatemalteco (Prensa Libre), destacaron los disturbios en una cabecera municipal, cuyos habitantes, dicen ambos medios, encolerizaron porque Werner Gudiel Morales Hernández, jefe edilicio, abandonó una reunión de trabajo en la que se analizaba el tema de la falta de agua potable. Craso error de un funcionario público obligado, por ley, a escuchar y atender las demandas de sus gobernados.
Según Canal 3, Morales Hernández lleva en el poder 18 años consecutivos, lapso que probablemente ningún otro edil haya logrado hasta hoy; eso explica en parte, las razones de los disturbios, pero de ninguna manera justifica los medios utilizados, puesto que con violencia lo único que se logra es el desprestigio y, desde luego, la repulsa de la mayoría de los ciudadanos que prefieren la paz a los actos fuera de la ley.
Sobre el tema del agua potable, debemos decir que es un asunto muy viejo. Hasta donde la memoria alcanza, desde la década de los 70’s, el vital líquido ha sido una de las principales carencias en todo el municipio. Por ejemplo, los habitantes de la cabecera municipal de la zona norte (atrás de la Escuela “Rafaél Landivar”, hasta parte del caserío “El Socorro”, tenían que acarrear el agua en un deficiente chorrito que instalaron donde se encontraba la Iglesia Vieja. De hecho, en “El Socorro no habpia agua potable, pese a estar a solo unos metros del casco urbano y sus habitantes se abastecían en pozos artesanales o en los ríos que rodean lo que hoy es el estadio de fútbol.
El agua que se consumía en el centro del poblado, lo traían mediante tubería desde un nacimiento de agua en la cima de un cerro colindante con San José Granados, municipio de San Antonio Zacatepéquez y se almacenaba en una presa ubicada en la parte alta de la cabecera de Palestina de los Altos. Hoy, lamentablemente, es tema de controversia y lo peor: motivo para una vergonzante revuelta. Y digo vergonzante, porque rompe, como hemos dicho líneas arriba, con una vieja tradición de respeto y armonía.
No hay pretexto para justificar un acto que lesiona la paz, aún cuando la autoridad haya perdido el respaldo ciudadano. En todo caso, que la permanencia o distanciamiento del alcalde en turno, se dirima en las urnas electorales y no mediante la violencia. En ese mismo tenor, sirva el triste episodio para que Werner Gudiel, haga un repaso de conciencia y atienda a tiempo el grito de una ciudadanía que posiblemente, ya no le quiera apoyar en sus aspiraciones de seguir gobernando a los palestinenses.
El buen político es aquel que sabe retirarse a tiempo; permanecer a fuerzas, es tanto como patear la buena suerte.
Por lo demás, deseamos sinceramente que las causas que motivaron la revuelta, se resuelvan conforme a derecho y apegada al sentimiento de paz y armonía de la mayoría de los ciudadanos de Palestina. Nos entristece que el municipio sea una mala noticia para el resto de los guatemaltecos; nos avergüenza y por lo tanto, convocamos a los protagonistas de tan lamentable desaguisado a una reconciliación inteligente, cuya única ganancia sea de beneficio para los buenos hombres y mujeres de ese pueblo.
A continuación, las notas periodísticas tomadas de los portales de Canal 3 y Prensa Libre; queden como un testimonio de lo que no podemos admitir de un pueblo con una historia de nobleza, trabajo, dedicación, respeto y armonía.
Disturbios en Palestina de los Altos (Canal 3)
Lo que todo parecía una mesa de diálogo en el municipio de Palestina de los Altos en Quetzaltenango, terminó con serios disturbios entre la población y el alcalde de aquella localidad Wagner Gabriel Morales. En plena reunión se caldearon los ánimos y tomaron el edificio municipal. El tema principal de la discusión sería la falta de agua, según la fuente de información de aquella localidad, sin embargo, los pobladores arremetieron contra el jefe edil por la escasez del vital líquido.
A él lo acusan de vender agua de esa jurisdicción a otros municipios vecinos, así como manipular este tema para sus intereses proselitistas con lo cual espera ganar un quinto períodos consecutivo ya que lleva 18 años en el poder.
Cuando todo parecía ser discusión sana, el alcalde abandonó la mesa lo cual el enojo de los participantes. Gabriel Morales, al notar que la gente había perdido el control, decidió refugiarse en la sede policíaca. Los pobladores también arremetieron contra loa PNC.
Se informó al cierre de esta nota informativa que los daños solamente habían sido materiales, pues los enardecidos vecinos, arremetieron hasta con las radiopatrullas.
Afortunadamente la intervención de las fuerzas especiales lograron el rescate del jefe edil y sus acompañantes.
Vecinos se rebelan en Palestina (Prensa Libre)
Una turba de unas 500 personas se rebeló ayer contra Werner Gadiel Morales Hernández, alcalde de Palestina de Los Altos, Quetzaltenango.
Los inconformes destruyeron la entrada de la subestación de la Policía y otros artículos usados por los agentes, y volcaron el autopatrulla 041-051.
La protesta comenzó alrededor de las 10 horas, y terminó dos horas después.
Los manifestantes intentaron agredir al alcalde. Incluso, amenazaban con lincharlo. Sin embargo, cuando Morales se vio intimidado, se refugió en la subestación de la Policía Nacional Civil (PNC), donde seis agentes estaban de turno.
Los vecinos lanzaron piedras y palos, volcaron un autopatrulla e irrumpieron en esa sede.
En medio del ataque apareció un grupo de policías de Quetzaltenango que logró rescatar al alcalde y a sus compañeros, y los trasladó a la cabecera departamental.
Los inconformes argumentaron que el alcalde vendió nacimientos de agua a municipios de San Marcos.
Morales tiene 18 años de ser alcalde de ese municipio; fue elegido por el Frente Republicano Guatemalteco y, para los próximos comicios, podría optar por la reelección, con la Gran Alianza Nacional.
“Este alcalde ha cometido actos de corrupción, pero la gota que derramó el vaso es que sin consultarnos vendió el agua, cuando está escasa”, explicó Pedro González Méndez, dirigente de los inconformes.
No obstante, los manifestantes no mostraron documentos que respaldaran las denuncias, ni una demanda en el Ministerio Público sobre los señalamientos.
Morales afirmó: “Es totalmente falso de lo que me están acusando; lo que hice fue ayudar a algunas familias que se encuentran en el límite del municipio, pero no he vendido nacimientos de agua a nadie. Si hay escasez de agua es porque estamos en verano”.
El alcalde presentó ayer denuncia, por lo sucedido, en contra de seis personas de un movimiento político.
Manuel Salguero, jefe de la Comisaría 41, informó: “Se le brindará protección al alcalde y esperaremos a que la situación se calme, para que pueda regresar”.
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